diumenge, 31 d’octubre del 2021

PEREZA COGNITIVA

 


Pereza cognitiva y redes sociales ¿cómo se relacionan?


Cuando una persona no hace el esfuerzo de pensar y aplicar el sentido crítico es más fácil que dé por ciertas informaciones falsas. Una posición que la hará más vulnerable a la manipulación que suele seguir el cauce de los grandes medios.

Todos tenemos la fabulosa habilidad para razonar. Pensamos, pero no lo hacemos bien, y en ocasiones nos dejamos llevar por la pereza cognitiva. Este sutil defecto supone, ni más ni menos, que desplazar el sentido crítico, dejar en stand by la capacidad de análisis y bajar toda barrera que pone filtros y contenciones a la mentira y a la manipulación.

Este tema es más relevante de lo que parece a simple vista. Así, algo que sabemos desde la psicología y la neurociencia es que pensar demanda una inversión cognitiva que se traduce en gasto de energía. Se activan múltiples funciones ejecutivas, tan importantes como la atención, el análisis, la síntesis, la comparación, el juicio, etc. Sin embargo, el cerebro es más perezoso de lo que podemos creer.

Este órgano prefiere ahorrar tiempo y, para ello, se deja llevar por ese piloto automático cargado de sesgos, prejuicios y de esa dejadez con la que dar por bueno todo lo que ve, lee o le cuentan. El resultado puede ser peligroso. Porque quien no piensa como debe, acepta información falsa y la trata como verdadera. El que no pone en duda nada puede ser víctima de todo…

Una de las cosas que más interesa a los expertos es comprender por qué las personas dan veracidad a la información errónea o malintencionada. La perezca cognitiva puede ser parte del problema.

¿Qué es la pereza cognitiva?

La pereza cognitiva define un enfoque mental limitado a la hora de procesar la información que recibimos. No tiene nada que ver con nuestro cociente intelectual. Es decir, podemos tener a personas muy inteligentes que, en un momento dado o en una circunstancia concreta, reducen sus recursos cognitivos. Así pues, algo que es bueno tener presente es que todos hacemos uso de esa dejadez mental.

¿De qué manera? En realidad de muchas, como es haciendo uso de los estereotipos o de los prejuicios. Es decir, lo que hace nuestro cerebro es simplificar la información que recibimos para ahorrarnos tiempo y energía. Esto se traduce en realidades muy comunes y peligrosas conocidas.

Pongamos un ejemplo. Hace unas semanas un personaje público se convirtió en viral porque en su cuenta de Twitter publicó que se necesitaban voluntarios para ir a recoger la lava del volcán de La Palma en las Islas Canarias (España). A los pocos minutos, las burlas, las críticas y los memes empezaron a pulular. Pocos fueron capaces de aplicar el sentido crítico para pensar que esa cuenta podría ser falsa…

Cuando no pensamos con detenimiento, triunfa la falsedad

Es necesario comprender por qué las personas somos susceptibles de creer en información errónea y falsa. El problema no está solo en quien perpetra el engaño o busca la manipulación de las grandes masas. En realidad, es decisivo saber qué nos hace vulnerables a todas esas trampas frecuentes y que tanto daño pueden causar.

Ahora bien que alguien nos diga, sencillamente, que “no pensamos” nos puede doler. Pero lo cierto es que no pensamos de manera correcta, nos dejamos llevar por la pereza cognitiva porque el mundo que nos envuelve -y más el de las redes sociales- es demasiado complejo. Recibimos información e imágenes nuevas casi a cada segundo. No da tiempo a procesar todo de manera meticulosa.

Por otro lado, es interesante comentar lo que descubrió un estudio realizado en la Universidad de Yale en el 2019. Ante la pregunta de por qué las personas nos creemos titulares falsos, se especuló que tal vez solo otorgamos etiqueta de verdad, creíble o plausible aquello que encaja con lo que ya pensábamos. Sin embargo, los resultados no fueron por dicha premisa…

Somos perezosos y nos cuesta mucho aplicar el razonamiento analítico venga de donde venga la información.

Preferimos preservar nuestras capacidades de pensamiento y análisis para otras tareas concretas. Cuando abrimos el móvil lo hacemos para distraernos, para descansar o divertirnos. Miramos y leemos sin pensar y esto hace que demos veracidad a realidades completamente manipuladas.

¿Cuál es la solución? El pensamiento reversible frente a la pereza cognitiva

La pereza cognitiva nos vuelve ciegos ante la evidencia y hace que triunfen las mentiras. Si bien todos contamos con cualidades para detectar ciertos peligros que hacen más probable nuestra supervivencia, la era digital también ha marcado una revolución en este sentido. Los enemigos no están físicamente a nuestro alrededor, habitan en nuestros dispositivos electrónicos.

Si deseamos hacer frente a ese pensamiento relajado, debemos activar el pensamiento reversible. Este enfoque define la capacidad que tenemos de razonar de forma bidireccional. Es decir, el razonamiento reversible nos permite manejar la información desde múltiples perspectivas. Nos ayuda también a resolver problemas desde varios enfoques sin importar lo contradictorios que resulten.

La clave está en quitarnos de encima esa dejadez, ese enfoque rígido. La pereza cognitiva es como cruzar una carretera mirando solo hacia delante, olvidando que el auténtico peligro está a ambos lados. Abramos los ojos, hagamos ese necesitado esfuerzo para evitar ser atropellados por la falsedad.

Jean Piaget definía el pensamiento reversible como un rasgo de auténtica inteligencia. Gracias a él procesamos la información desde un prisma más amplio, sin quedarnos nunca en la primera opción o en lo aparente.

Pereza cognitiva y redes sociales ¿cómo se relacionan? - La Mente es Maravillosa

diumenge, 24 d’octubre del 2021

EL SILBIDO DEL MAR CARIBE

 


El fascinante silbido del Mar Caribe que se oye hasta el espacio (el efecto Rossby)

Un silbido fascinante navega desde la superficie del Mar Caribe hasta el espacio y expertos han analizado su naturaleza y conexión con el cosmos.

Los sonidos en la Tierra distan mucho de aquellos que se encuentran en el espacio. La experiencia de escuchar el universo es algo que pocos pueden explicar. En ocasiones la NASA ha intentado descifrar algunas de sus “voces” más extrañas. No obstante, se dice que un sonido muy particular se extiende hasta llegar a las estrellas, uno que no se genera en el espacio, un silbido que viaja desde el Mar Caribe en la Tierra.

En medio de la fuerza incesante del océano, el Mar Caribe parece susurrar un silbido tan fugaz como intenso. Un sonido que puede escucharse en forma de oscilaciones en el campo gravitatorio de la Tierra. Pero ¿qué es exactamente este silbido y qué lo hace tan intenso?

De acuerdo con investigadores de la Universidad de Liverpool, el silbido del Mar Caribe (ubicado al sureste del Golfo de México) se debe a un fenómeno conocido como el silbido de Rossby. Este ocurre cuando una gran ola se propaga lentamente hacia el oeste del mar e interactúa con el fondo del mar. Al formar esa interacción, la ola se extingue justo en el límite occidente y reaparece en el lado oriental de la cuenta creando un agujero de gusano de Rossby.

La clave de este fenómeno particular es que se requieren de ondas de longitudes muy particulares para sobrevivir al agujero de gusano. Pero si se tienen las características necesarias, entonces las ondas se refuerzan y producen una oscilación clara y precisa. Esta oscilación fluye dentro y fuera de la cuenca en el Mar Caribe cada 120 días. Durante ese período, se produce un efecto en el campo gravitatorio de la Tierra que es visible por los satélites en el espacio.

¿Cómo funciona el silbido del Mar Caribe?

Durante el período de 120 días, el flujo de las ondas en la cuenca del Mar Caribe produce un silbido que toca la nota “La bemol”. Esta nota significa muchas octavas por debajo del rango audible para los humanos, pero es lo suficientemente fuerte para ser detectado por un satélite en el espacio.

Los investigadores creen que el silbido de Rossby puede tener un alto impacto en el Atlántico, ya que regula el flujo de la Corriente del Caribe; un componente clave del motor climático del océano. Esto demuestra que incluso en los pequeños susurros de la naturaleza se pueden encontrar claves del funcionamiento de la Tierra. Sólo basta que estemos dispuestos a escuchar.

Este fenómeno puede variar el nivel del mar en hasta 10 cm a lo largo de la costa de Colombia y Venezuela, por lo que entenderlo puede ayudar a predecir la probabilidad de inundaciones costeras”, apunta la investigación.





dimarts, 12 d’octubre del 2021

y...PARA QUE QUIERES PAREJA...??

 


Y...PARA QUÉ QUIERES PAREJA...??

“Un hombre mayor... como yo, como tú , con su vida en la recta final... por qué - para qué- quiere una pareja..??
Bueno, esto me recuerda a un señor que solía frecuentar un Bar, siendo él abstemio. Así que pedía agua mineral con hielo.
¿ Para que vienes a la Cantina , su tú no bebes alcohol ? - le preguntaban.
- Un Bar tiene mucho más que ofrecer, que sólo alcohol. El alcohol es sólo un lubricante social.- - -respondía él.
Y todo esto, porque la vida sexual entre mayores , no tiene la misma importancia que entre una pareja de jóvenes.
Y sí. Pensar que el sexo es el único motivo para casarse, es igual que pensar que ir al Bar es sólo para embriagarse.
De hecho, aún en las parejas jóvenes el divorcio se da, a pesar de tener sexo diario. Y es que tan sólo unos cuantos minutos del día lo dedican a ese placer.
Y...el resto del día lo ocupan en " ser pareja "...y si como pareja no congenian el sexo no es suficiente para mantenerlos unidos. Y a pesar de estar casados, " se sienten solos ".
Y los que no tienen pareja, se sienten solos también cuando en verdad no lo están : tienen hijos y nietos que los adoran.
El sentimiento de soledad es mala compañía...te acompaña, pero no te ayuda.
Buscar en otro la solución al sentimiento de soledad, es una salida falsa, pues la soledad es muy, pero muy mala consejera.
Es muy feo sentirse solo porque no hay nadie a tu lado...pero es espantoso que estando alguien a tu lado ... y aún así te sientas solo.
Entonces... ¿ Por qué buscar pareja...?
Porque un compañero de vida no es un complemento sexual solamente. Nuestra necesidad va más allá de lo visible y de lo sensible .
Es hallar con quien salir a caminar a un ritmo nuevo . Aprender a caminar al ritmo del otro.
Acostumbrarse a una mano nueva , y a la tibieza y la humedad de otros labios...
Ver el amanecer con la luz de unos ojos femeninos...
Disfrutar una plática intrascendente a tu medida. Alguien con quien beber despacio el Té de la mañana.
Alguien con quien sentarse a contemplar el atardecer de cada día, a quién entender entre líneas....ése lenguaje lateral y cómplice que tenemos los enamorados, y que nadie entiende, aún estando entre la gente :
Que cuando me diga " tengo frío "...yo entienda. "_abrázame ".
Y cuando yo le diga, " ten,tápate ", ella sepa que en realidad , le digo " te quiero ".
Y si decidimos estar callados...aún en el silencio, podamos escuchar la misma melodía...”
AMOR ES LA CLAVE

ANÓNIMO



dilluns, 4 d’octubre del 2021

SÈNECA Y EL TIEMPO

 


5 lecciones de Séneca para aprovechar bien el tiempo

Cuando lleguen al final, entenderán que estuvieron muy ocupados en no hacer nada”, advirtió Séneca hace siglos. El filósofo estoico tenía claro que el tiempo es la posesión más valiosa que tenemos, pero aún así lo malgastamos sin pensar en ello.

A pesar de que el peso de la mortalidad pende continuamente sobre nuestras cabezas, solemos vivir como si fuésemos inmortales. Preferimos no pensar en el final para exorcizar nuestros miedos más atávicos. Sin embargo, si queremos aprovechar bien el tiempo y hacer algo significativo con nuestra vida, debemos tener presente la frase latina que nos recuerda nuestra mortalidad: memento mori.

Consejos para aprovechar el tiempo, según Séneca

1. Hazlo ya, no dejes que la vida pase

Posponer las cosas es el mayor desperdicio de nuestra vida: nos arrebata cada día a medida que llega y nos niega el presente prometiéndonos el futuro”, escribió Séneca. A lo cual añadió: “mientras perdemos nuestro tiempo dudando y postergando, la vida se acelera”.

Todos hemos procrastinado en algún momento. Sin embargo, cuando se convierte en la norma, cuando postergamos continuamente planes importantes que podrían cambiarnos la vida para bien, tenemos un problema porque la vida no espera.  

La procrastinación puede deberse a la pereza, pero en la mayoría de los casos sienta sus raíces en el miedo a la incertidumbre. Por eso Séneca nos recuerda que “la fortuna tiene el hábito de comportarse como le place”, de manera que esperar no suele aumentar nuestras posibilidades de tener éxito, sino que a menudo solo sirve para que se acumulen más obstáculos en el camino.

La solución consiste en eliminar de nuestro vocabulario la frase: “lo haré mañana” para ponernos manos a la obra ahora mismo. Solo tenemos que dar el primer paso. Romper la inercia. Como aconsejara Séneca: “aférrate a la tarea de hoy y no tendrás que depender tanto de la tarea de mañana”.

2. Valora más tu tiempo que tus posesiones

Si viésemos a una persona quemando dinero, pensaríamos que está loca. Sin embargo, cada día malgastamos minutos y horas, pero no pensamos que estamos locos, aunque el tiempo sea nuestra posesión más valiosa.

A diferencia del dinero, que se puede gastar y recuperar, el tiempo es un recurso precioso que nunca podremos recuperar. Séneca decía: “La gente es frugal en la protección de sus bienes personales; pero en cuanto se trata de malgastar el tiempo, son los que más malgastan la única cosa en la que está bien ser avaro”.

Redefinir el valor del tiempo siendo conscientes de su finitud es el primer paso para utilizarlo inteligentemente, gestionarlo mejor y, sobre todo, dedicarlo a aquellas cosas que realmente valen la pena o son significativas en nuestra vida. Una estrategia para comenzar a valorar el tiempo sobre las posesiones consiste en preguntarnos: ¿cuánto tiempo de la vida debo dedicar para comprar eso?

3. Reduce el ajetreo insustancial

Una persona preocupada no puede realizar ninguna actividad con éxito… Para un hombre preocupado, vivir es la actividad menos importante. Sin embargo, no hay nada más importante y difícil de aprender que vivir”, decía Séneca.

Sus palabras cobran una relevancia especial en la actualidad, en una época en la que estamos sometidos a un flujo incesante de estímulos externos que reclaman nuestra atención. Pendientes de los compromisos sociales, las pantallas, las noticias, los mensajes, el trabajo… nuestra agenda se llena y no nos queda ni un minuto libre.

Eso genera la sensación de estar muy ocupados haciendo cosas muy importantes, pero si sacamos el saldo al final del día, podríamos darnos cuenta de que hemos hecho pocas cosas que nos hagan felices o que nos acerquen a nuestras metas significativas en la vida.

Esa vertiginosidad cotidiana puede atraparnos durante años, haciendo que la vida se nos escape. Por eso es importante que repensemos nuestro día a día e intentemos eliminar todas las distracciones superfluas y las ocupaciones que no nos aportan nada mientras hacemos hueco en nuestra agenda para esas actividades que realmente nos aportan nuestro bienestar o nos hacen sentir más plenos y vivos.

4. Sé implacable con lo que no te aporta nada

Si quieres aprovechar al máximo tu tiempo, tienes que aprender a decir “no”. Séneca advertía: “Cuánto has devastado tu vida porque no sabías lo que estabas perdiendo, cuánto has desperdiciado en dolor sin sentido, alegría tonta, deseo codicioso y diversiones sociales. ¡Te darás cuenta de que te estabas muriendo antes de tiempo!”.

Para aprovechar bien el tiempo necesitamos aprender a establecer límites. Algunos de esos límites están dirigidos a los demás, a todas esas personas que se creen con derecho a usar nuestro tiempo recargándonos con responsabilidades que no nos pertenecen. Por tanto, eso significa decir “no” a muchas de las cosas que estamos haciendo por los demás y que podrían hacer ellos mismos, así como a todos esos compromisos, invitaciones y obligaciones carentes de significado.

No obstante, también debemos aprender a decir “no” a nosotros mismos. Establecer límites para no perder un tiempo precioso. Implica decir «no» a estados emocionales que nos dañan y nos arrebatan momentos de felicidad mientras nos dejamos consumir por la culpa, la ira o el resentimiento. Si no tenemos cuidado, tanto las imposiciones sociales como esos estados emocionales terminarán expandiéndose hasta consumir gran parte de nuestra vida.

5. No supedites la felicidad al logro de tus metas

Es inevitable que la vida no solo sea muy corta, sino también muy infeliz para quienes adquieren con gran esfuerzo lo que deben conservar con un esfuerzo aún mayor. Logran lo que quieren laboriosamente; poseen ansiosamente lo que han logrado; y mientras tanto se les escurre un tiempo que nunca más volverá. Nuevas preocupaciones toman el lugar de las viejas, las expectativas despiertan más expectativas y la ambición más ambición”, dijo Séneca.

En una cultura que premia el esfuerzo constante y las metas siempre más ambiciosas, este mensaje estoico puede resultar contradictorio. Sin embargo, perseguir continuamente nuevos objetivos, nunca satisfechos con los logros alcanzados, solo conduce a un estado de ansiedad e infelicidad permanente.

En cambio, uno de los consejos de Séneca para aprovechar el tiempo consiste en no ser demasiado ambiciosos. Mientras perseguimos nuevas metas, el tiempo se nos escapa. Una meta siempre conduce a otra y nos engaña haciéndonos pensar que la felicidad está en la consecución de cada una de ellas. La solución pasa por reajustar nuestras expectativas y preguntarnos cómo podemos llevar una vida más significativa aquí y ahora, mientras trabajamos para lograr determinados objetivos.

En cualquier caso, Séneca también advertía “no debes pensar que un hombre ha vivido mucho porque tiene el pelo blanco y arrugas: no ha vivido mucho, solo ha existido mucho… la parte de la vida que realmente vivimos es pequeña. Porque todo el resto de la existencia no es vida, sino simplemente tiempo”. La clave para aprovechar bien el tiempo consiste en volver los minutos vacíos en minutos significativos.


▷5 lecciones de Séneca para aprovechar bien el tiempo ⋆ Rincón de la Psicología (rinconpsicologia.com)